Se acercan las vacaciones de Semana Santa y, como siempre que se nos presenta un periodo vacacional, por breve que sea, experimentamos un choque de intereses:

  • Por un lado, nuestra ilusión de aprovechar esos días libres para desconectar de las presiones del día a día, relajarnos y recuperarnos.
  • Por otro, nuestra ansia de invertir ese tiempo en experimentar, viajar, ocuparnos con actividades que normalmente no podemos hacer.

Ante estos dos objetivos tan diferentes nace el concepto de las vacaciones inteligentes. Llamamos así a aquellas que están diseñadas de tal manera que, además de permitirnos desconectar, hacen que estemos en contacto con nuestros auténticos intereses, metas, valores, etc… y que hagamos algo para nosotros y para nuestro desarrollo personal con ese tiempo.

Algunos ejemplos de vacaciones inteligentes podrían ser un curso de idiomas en el extranjero; una escapada solos en la que forzarnos a hacer nuevos contactos, un viaje en familia a un país donde tengamos que hablar en un idioma diferente, un retiro para dedicarnos a una tarea creativa, etc…

Desde Centro Psicología Bilbao os dejamos unos consejos para que podáis tomaros unas vacaciones inteligentes:

  • En primer lugar, no perder de vista que las vacaciones tienen que permitirnos cambiar de rutina y tener tiempo de disfrute. Sobrecargarnos de actividades constantemente no es una buena idea.
  • Dedica un tiempo en tus vacaciones a hacer algo diferente por ti: por tus aficiones, por tu carrera profesional, por tu salud física, por tus metas…
  • Es conveniente contar con algún día que no esté completamente planificado, pues el poder improvisar ayudará a nuestra autoestima.
  • Duerme bien. Para que las vacaciones presenten ventajas importantes, es imprescindible que estemos descansados.
  • En las vacaciones puedes sacar tiempo para tu familia, pero no olvides dedicar también ratos de ese tiempo a ti mismo y a tu autocuidado, aunque tengas hijos pequeños. Buscar tiempo para estar a solas con la pareja, en caso de tenerla, es también muy importante, se tengan o no hijos.
  • Aprovecha este tiempo para pensar en tus planes de futuro desde una perspectiva más relajada. Es un buen momento para planificar y para dar los primeros pasos hacia nuestras metas. Un proceso de coaching presencial u online puede ayudarte a conseguir esto.
  • Relacionate con personas diferentes. Un nuevo contacto siempre podrá darnos una nueva perspectiva, y puede resultarnos además muy útil para aprender y avanzar.