¿Cómo hago para que mis hijos no utilicen demasiado los aparatos electrónicos? ¿Qué puedo hacer si no entienden las consecuencias negativas de un uso excesivo? ¿Cómo hago para que mis hijos no recurran a internet cada vez que se aburren? Seguro que si tienes hijos, te has hecho estas preguntas más de una vez; y es que la tecnología ha venido para quedarse, los niños pequeños parece que han nacido con un móvil debajo del brazo y los más mayores nos enseñan cosas que ni si quiera sabíamos que existían.

Lidiar con la tecnología en nuestras casas no es tarea fácil, y las discusiones y peleas son en muchas ocasiones el pan de cada día, pero es necesario aprender a convertirlo en una oportunidad para enseñarles valores como: el autocontrol, la tolerancia al aburrimiento, el cumplimiento de normas y acuerdos y el juicio propio.

Basados en la Disciplina Positiva, os ofrecemos algunos consejos que pueden facilitaros a la hora de intentar resolver estos problemas y verlos como una oportunidad de aprendizaje:

  1. Entender la situación

Ante todo, debemos entender la situación. La tecnología es algo que no podemos evitar, no podemos aislar a nuestros hijos e hijas de ella. Móvil, Tablet, ordenadores… forman parte de su día a día, los quieren para comunicarse, estar a la moda, estudiar, hacerse fotos, etc. Forman parte de su cultura y de su relación con el mundo. Es importante que hablemos con ellos sobre los programas que ven, juegos a los que juegan o redes sociales en las que se meten. Interesarse por las cosas que les gustan y la opinión que tienen al respecto, ayuda a ver la otra cara de la moneda y a ser más tolerante y respetuoso.

  1. Sé un ejemplo

Recordad algo muy importante, como adultos somos modelo, nuestros actos y nuestras palabras deben ser coherentes. Un buen ejercicio es analizar nuestra propia conducta, puede que si uno pasa demasiado tiempo con el móvil o viendo la televisión ellos hagan lo mismo. No podemos convencerles de que el uso excesivo es perjudicial si nosotros mismos pasamos demasiado tiempo conectados. Es importante intentar no utilizar el móvil o televisión durante las comidas, saber prescindir del wifi en algunos momentos y buscar otras alternativas de ocio. Esto ofrece un modelo a seguir a los más pequeños.

  1. Decide lo que harás y hazlo

Como adulto, puedes no querer que en tu casa se utilicen aparatos electrónicos, se consecuente y no los compres. Una buena opción es hacer que tus hijos trabajen para ganar parte del dinero para pagarlos, así se les enseña el valor de las cosas, así como el sacrificio para conseguirlas. Se puede tomar la decisión de que la tecnología esté en un lugar común y no en las habitaciones. Convertir el uso de estos entretenimientos en una actividad común, puede servir para crear vínculo y comprender mejor sus gustos y sus formas de diversión.

Decidir los horarios y los programas que pueden ver si no tienen edad para consensuar es esencial. Una vez hecho esto, cuando se traspasan las normas, es importante actuar sin sermones y recordarles lo acordado. A medida que van creciendo, se pueden pactar con ellos la frecuencia de uso, horarios y contenidos. Es mucho más fácil poner límites cuando ellos han participado en el proceso.

  1. Enseña habilidades

Debemos ver la tecnología como una forma de enseñar y moldear habilidades en nuestros hijos. En muchas ocasiones, el uso de la tecnología es un motivo de peleas entre hermanos. Una manera de enseñar otras habilidades mediante la tecnología es usar estos enfrentamientos como una oportunidad para que se pongan de acuerdo, sobre quién va a utilizar el ordenador o qué programas de televisión van a ver.

Además, hablar sobre los valores que transmiten las redes sociales o los programas de televisión y de lo que nos hacen creer sobre el mundo que nos rodea puede ser una buena oportunidad para enseñarles a no dar todo por sentado. Ofrecerles artículos sobre los beneficios y riesgos de las nuevas tecnologías puede ser una buena manera de enseñarles a no dar las cosas por hecho.

  1. Haz llegar tu mensaje

Desde la calma y sin recurrir al sermón, es importante hablar de las consecuencias negativas de los aparatos electrónicos, hacerles ver el mensaje de preocupación y razonarles el por qué es importante limitar el tiempo que los utilizan. Los niños entenderán las razones y serán mucho más conscientes de los aspectos negativos y de las desventajas de un uso excesivo.

  1. Busca alternativas

Una de las preocupaciones es que, ante el aburrimiento, los más pequeños elijan jugar a los videojuegos o estar en las redes sociales, en vez de salir a la calle o hacer otras cosas. Para ello podemos ayudarles a buscar alternativas, una de las estrategias es hacer con ellos una lista de actividades que pueden hacer cuando se aburren y ponerla en un sitio visible; cuando llegue el momento recordarles la lista y las propuestas que hicieron. Intentar no ofrecerles el móvil ante momentos en los que no saben qué hacer. En la sociedad en la que vivimos de inmediatez y estimulación constante, es esencial enseñarles a tolerar el aburrimiento, estar tranquilos y buscar alternativas por sí mismos.

  1. Actúa en tu metro cuadrado

No se puede esperar que nuestros hijos cumplan todo lo acordado en relación al uso, horarios y programas. Si hay sospechas de que se saltan las normas muy a menudo, desconectar el televisor o guardar los aparatos hasta que estén dispuestos a cumplir con el trato puede ser una buena manera de gestionarlo (siempre teniendo en cuenta que las consecuencias deben ser lógicas y cumplir con las siguientes características: estar relacionadas, ser razonables, ser respetuosas y estar revelada con anticipación). No podemos esperar que cumplan siempre lo acordado, pero si podemos tomar decisiones de lo que nosotros vamos a hacer.

 

Como adultos debemos comprender que es necesario que los más jóvenes aprendan estrategias para lidiar con las nuevas tecnologías, a ser críticos con el mundo que les rodea y comprender que un uso excesivo puede acarrear consecuencias negativas. Si observamos el “problema” como una oportunidad, podremos valorar la gran oportunidad que nos ofrece la tecnología para entrenar a nuestros hijos en habilidades que queremos que posean en un futuro.

Si estás interesado/a en conocer la Disciplina Positiva, tenemos un taller introductorio y otro para familias de adolescentes programados para este año 2018. Puedes acceder a más información en nuestra web www.disciplinapositivabilbao.com