El 20 de noviembre es el Día universal del Niño. Nos encontramos a menudo en la consulta con familias preocupadas por el comportamiento de sus hijos/as. Los motivos más frecuentes que hacen que las familias decidan acudir a un profesional de la psicología son:

  • Ansiedad infantil y sus evidencias, tales como tics.
  • Problemas de comportamiento, desafíos, etc.
  • Dificultades de aprendizaje.
  • Carencias en Habilidades Sociales o problemas de relación.
  • Situaciones de conflicto concretas que interfieren en el correcto desarrollo del niño/a (por ejemplo, bullying).
  • Miedos infantiles.
  • Adicciones (por ejemplo, a la tecnología).
  • Excesivas peleas entre hermanos/as que afectan a la convivencia.
  • Dificultades a la hora de seguir las rutinas básicas (hacer los deberes, comer, dormir…)

Es innegable que en ocasiones, especialmente cuando los/as niños/as son más mayores, es necesario trabajar con ellos/as para dotarles de herramientas para afrontar el problema. Sin embargo, vemos muy a menudo que trabajando casi exclusivamente con la familia (padre y madre), muchas de las situaciones que inicialmente son el motivo de consulta, mejoran. Esto se da debido a que la familia funciona como un sistema y, a  veces, trabajar con una parte conlleva un cambio también en la otra. En esta línea, es frecuentemente más fácil trabajar con los padres por ser ellos quienes ven el problema y quienes como adultos pueden llevar a cabo el cambio de forma más sencilla.

Por otro lado, también observamos desde las gafas de la Disciplina Positiva que muchas veces existe un mal comportamiento en el/la niño/a que lleva como base a nivel emocional un sentimiento de no ser tenido/a en cuenta. El sentido de pertenencia es fundamental para cualquier ser humano, y cuando una persona se siente poco importante, no tenida en cuenta, etc., puede realizar comportamientos erróneos (mala conducta) bajo la falsa creencia de que así logrará pertenecer. Por eso es necesario indagar en las causas que subyacen en el fondo del mal comportamiento, entender que siempre hay algo detrás de lo explica y lo mantiene.

En esta línea, si quieres conocer cuál es la causa del mal comportamiento de tu hijo/a, quizá te interese leer algo acerca de Disciplina Positiva.